El periodista español Emilio Morenatti, integrado en las tropas estadounidenses en Afganistán, ha resultado herido a causa de una bomba colocada en una carretera, al igual que su colega indonesio Andi Jatmiko, informó hoy la agencia Associated Press, para la que trabajaban ambos reporteros.
En total, 18 periodistas han perdido la vida en Afganistán entre 1992 y 2008, lo que convierte al país centroasiático en el undécimo más peligroso para los trabajadores de los medios de comunicación, según cifras del Comité de Protección de los Periodistas.
Son muchos los periodistas que cada día se tienen que enfrentar con la información más dura de todas la de convertirse en los protagonistas de la actualidad, pero por desgracia no de su trabajo, sino de su muerte. Se valora mucho lo que intentan cada día hacer decenas de periodistas que toman la decisión de contar al mundo como pueden lo que sucede en aquellos lugares donde las armas forma parte del paisaje cotidiano. Afganistán es uno de esos países donde desde 1992 se han cobrado 18 víctimas de profesionales de la información, 18 personas que eran los altavoces de muchos seres humanos que son las verdaderas víctimas de las guerras y que ven como cada día sus gobernantes destrullen sus ilusiones y esperanzas.
Pero su trabajo no es en vano, ellos pusieron su granito de arena para cambiar el mundo
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