Para el PP, la reforma no creará empleo

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, afirmado que no tiene claro que la reforma laboral del Gobierno sirva para crear empleo, “algo que cualquier reforma debe pretender” ya que, en su opinión no es una reforma laboral global y no habla nada de la adaptación de los convenios colectivos a la realidad empresarial española.

Por tanto, el líder popular no ha querido pronunciarse más al respecto y se muestra expectante y afirma que "hasta que no vea el texto en el BOE, no voy a hacer valoraciones definitiva ya que el tema está confuso. Además los medios de comunicación han interpretado de una manera diferente qué ocurre con los contratos de 45 días, 33  y 20 días, no tengo claro que pasa con los árbitros, es decir, hay muy poca claridad".En este sentido, Rajoy ha recordado que no es lo mismo una empresa de 3.000 trabajadores, que una pequeña y media empresa "que tiene una situación completamente diferente", y ha lamentado que en la reforma no se hable de la formación, "otro de los temas capitales para el futuro del empleo en España".

Mucha confusión y poca claridad

El presidente del PP ha denunciado la confusión que existe sobre el texto de la reforma laboral del Gobierno, que no va a valorar de momento, ya que "hay mucha confusión y muy poca claridad". Sobre este asunto, ha destacado que después de dos años hablando de este tema, "ahora se pretende resolver en dos días", ayer por primera vez se citó al PP y se le enseñó un texto distinto al presentado hoy. "Hay que saber lo que se quiere hacer, hay que entregar los papeles a tiempo y decir con claridad lo que se pretende hacer", ha afirmado.

Futuro de España

Por último, ha destacado que iba a explicar a todos los líderes del PPE con los que se iba a reunir, que España, pese a estar viviendo una situación delicada, "saldrá adelante tal y como ha demostrado no hace muchos años, con un control el déficit público, sin gastar por encima de lo que tenemos" y a reformas estructurales". Y ha resaltado el papel de las empresas y las familias, "que han hecho los deberes con un altísimo coste social ya que se han perdido muchos puestos de trabajo".